Les
contaré un secreto que les ayudará a desenamorarse de inmediato y a olvidar que
usted tiene la posibilidad de estar con esa mujer que le roba el sueño, que le
corta el aliento y esa por la cual mataría si le esbozase una sonrisa.
Lo
primero que se debe hacer es pensar que uno no es lo suficientemente bueno para
ella. Aquí podemos encontrar excusas de todo tipo, desde nuestro físico, por
llamarlo de alguna forma, nuestras posibilidades económicas para satisfacer sus
deseos, o bien, podemos alegar que estamos desequilibrados mentalmente. Casi
todo vale.
Después
tendremos que tener la capacidad de hacer el capullo. Pero no vale una versión
blanda de nuestra faceta de capullos. No. Deben hacer el capullo como nunca
antes lo han hecho. Si ella les habla, contesten mal. Si les mira, bajen la
cabeza. Y si les sonríen… ¡Oh dios! Enfádense con ella. Inventen cualquier
excusa como que ha hablado mal de su persona, o cualquier otra memez del estilo
que les permita comenzar una discusión. Cuanto mayor sea la discusión mejor. Y
si hacen que ella llore. Misión casi conseguida. Están cerca del
desenamoramiento.
Bien,
si han seguido los pasos, la cosa irá por el buen camino. Aunque siempre puede
haber problemas. Como que ellas estén enamoradas, o que sean demasiado tercas.
También es posible que no lo hayan hecho bien, o que sean demasiado buenos. En
este juego todo vale, ya saben.
Si
ella prosigue con su rutina de hablar diariamente, niéguese, esto es más fácil
si no es cara a cara. Deje de escucharla, consolarla, mimarla, etc… ¡Vuélvase
un hombre! Y si van juntos por la calle, vuélvase a mirar a otras mujeres, da
igual como sean, mírelas, eso siempre está bien, y si no se enfada, comente con
ella lo bellas que son esas mujeres.
Por
tanto, si han seguido los pasos y la cosa no funciona, olvídenlo. Están
locamente enamorados, o sabes escuchar demasiado bien, y… te quiere como amigo.
O también te puede decir que no es el momento, pero que algún día harás muy
feliz a alguien. En ese momento querrán odiarla, e incluso no volver a hablar
con ella. Pero, lamento decirles, que si han sido capaces de hacer el capullo
para olvidarla, es porque son demasiado buenos como para perderla.
Así
que, no me hagan caso, y si quieren a alguien luchen, y déjense de estupideces…
porque si ella no es la mujer o el hombre de sus vidas… algún día harán muy
felices a otra persona.